En ceremonia especial en la Embajada de México en Canberra, el ministro de las Artes Tony Burke regresó, al embajador de México , Eduardo Peña Haller dos objetos significativos pertenecientes al patrimonio cultural de México.
Los dos objetos importados fueron incautados por inspectores del Departamento de Infraestructura, Transporte, Desarrollo Regional, Comunicaciones y Artes con la asistencia de la Fuerza Fronteriza Australiana. Las incautaciones tuvieron lugar en virtud de la Ley de Protección del Patrimonio Cultural Mueble de 1986, que prevé la devolución de bienes culturales extranjeros que hayan sido exportados ilegalmente de otros países e importados a Australia.
Los objetos son un ex-voto, pintura tradicionalmente hecha en México para ilustrar milagro y honrar la intervención de un santo, y una vasija de cobre que data del siglo 13 elaborada por los indígenas mixtecos. El ministro Burke dijo que era importante que se protegiera el patrimonio cultural de otras naciones:
“Estoy muy contento de que nuestras dos naciones, como signatarias de la Convención de la Unesco de 1970, puedan trabajar juntas para que estos dos objetos puedan regresar a su legítimo hogar. Estoy orgulloso de trabajar con el gobierno mexicano para proteger y devolver su patrimonio cultural”, mencionó.
Por su parte, el embajador Peña Haller dijo que estaba complacido de que los objetos regresaran a México, donde pertenecen, y reconoció el compromiso de las autoridades australianas de devolver el patrimonio cultural a sus propietarios originales:
“Me gustaría agradecer al gobierno australiano, con quien colaboramos estrechamente, por su compromiso con el retorno seguro de estos objetos a nuestro país, donde podrán ser protegidos por generaciones”, comentó.
Peña Haller reconoció que estos objetos no son “meras cosas”; más bien, son una parte integral de la cultura que cuenta una historia sobre los pueblos de México y su modo de vida:
“El ex-voto cuenta la historia de sobreviviente de accidente minero y su gratitud a La virgen de Charcas”, mientras que “la vasija de cobre en miniatura, aunque pequeña, es un artículo raro y tiene un significado simbólico en la cultura mixteca, ya que el cobre no era un material común o fácilmente accesible”, explicó.
El Embajador agregó que los países deben continuar con la lucha contra el tráfico ilícito de bienes culturales y aumentar la conciencia pública sobre la importancia cultural de los objetos del patrimonio.